¿QUÉ SON LAS FIESTAS POPULARES?
De acuerdo con lo establecido en la Ley Orgánica de Cultura y Patrimonio, el Estado, a través de las entidades correspondientes, está en la obligación de mantener y promover el patrimonio cultural. Como corresponsal directo de este cumplimiento está el Ministerio de Cultura y Patrimonio, en conjunto con el Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC), dado que son las instituciones encargadas de llevar a cabo el proceso de patrimonialización de las fiestas y manifestaciones culturales.
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De acuerdo con los datos proporcionado por parte del Ministerio de Cultura y Patrimonio, el Estado mantiene un presupuesto fijo para salvaguardar el patrimonio cultural, mismo que es repartido de la siguiente manera, y tomando en cuenta las respectivas consideraciones.
Para que una fiesta sea considerada patrimonio, tiene ser constitutiva de la identidad de un grupo social, siendo este el elemento más importante dado que la celebración de las distintas fiestas activa un ciclo organizativo dentro de las comunidades. Siendo así, una fiesta que es considerada patrimonio tiene importancia, no solo por peso de la representación cultural, sino también por la manera en que integra a otras esferas de la sociedad como es la economía y la educación. No obstante, la obtención de este título no es una garantía para que una fiesta se mantenga en el tiempo.
Por la vistosidad de las fiestas y sus características, el tema de la patrimonialización no siempre es un beneficio.
En casos como el de los Yumbos, los actores de esta manifestación cultural no desean ser consideradas como patrimonio para evitar que su fiesta o celebración sea institucionalizada. Asimismo, con la presencia del sincretismo cultural y una cultura contemporáneo emergente, muchas de las fiestas se han visto forzadas a tener que adaptarse hacía objetivos turísticos, como ha sido el caso del Corpus Christi. En el caso de los Diablos de Alangasí, tanto el GAD como la comunidad que posee esta tradición tienen como objetivo salvaguardar el tema religioso detrás de esta manifestación.
Jorge Gómez Rendón
Antropólogo
Por su parte, el Ministerio de Cultura asegura que existe un Plan de Fortalecimiento Institucional, mismo que contiene acciones enfocadas en salvaguardar el patrimonio y evitar que este sea vulnerado. Además de esto, se reforman constantemente los lineamientos para la gestión del patrimonio material e inmaterial. Por tanto, y considerando que en muchos de los casos los GAD han tomado las riendas de la organización de las fiestas, es necesario que estos cuerpos institucionales reciban la respectiva capacitación para el manejo del presupuesto y el respeto del valor cultural.
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No obstante, de parte de la sociedad y el área de estudio encargado de monitorear las manifestaciones culturales, se presentan preocupaciones. Jorge Gómez, a partir de su trabajo de campo ha concluido que existe un conocimiento mínimo sobre las fiestas populares y su importancia para la sociedad, esto debido a que hay escasas investigaciones. ​
Las fiestas populares solo pueden mantenerse vigentes durante el tiempo, si así lo desean los poseedores de estas costumbres. Las políticas públicas destinadas a salvaguardar el patrimonio son mecanismos que de una u otra forma pueden ayudar a conservar los festejos, sin embargo no es una garantías de que estas perduren o mantengan su significado.